patito

patito

miércoles, 1 de junio de 2011

Salmorejo, una deliciosa fuente de salud


Ahora que llega el buen tiempo, que apetece tomar cosas más fresquitas, es el mejor momento para disfrutar de un delicioso salmorejo. Este plato, típico de la zona occidental de Andalucía, es una maravilla que puede servir de entrante, de base para otros platos o incluso de plato principal si le añadimos una buena guarnición. Además os garantizo que es una medicina estupenda que favorece el moreno, por su contenido en betacarotenos. Desde que lo tomo con asiduidad, noto que me cuesta mucho menos ponerme doradita, y me ahorro pastillas y chorradas de farmacia.

 He notado que muchos afrontan con cierto miedo la elaboración de este platillo estupendo, y de verdad os prometo que es facilísimo. Lo que pasa es que hay gente que lo hace y adopta un aire tipo "es un secreto de familia, no lo entenderías" que merece mil patadas voladoras. Si seguís estos truquitos que voy a daros, os garantizo un resultado impecable.

Si queréis una versión light, limitaros a mezclar tomate con más zahahoria (para que le dé más cuerpo) y ajo, con un poco de agua y aceite. También resulta estupendo, aunque menos sabroso. Y engorda poquísimo.

Ingredientes (para unas 4 personas)




















750 gramos de tomates maduros, olorosos (unos 3 tomates hermosos)
225 gramos de pan de bollo (la mitad del grandote que venden en Mercadona). Hay quienes sólo ponen miga, pero yo, poniendo corteza, obtengo ub estupendo resultado.
110 cl de aceite de oliva virgen extra
100 agua fria
sal al gusto
1 diente de ajo (o más, si os va la marcha) picadito
160 gramos de zanahorias
1 cucharada o más de buen vinagre de vino (yo no le pongo)

Guarnición

1 huevo duro por persona
tacos de jamón
Cebolla picada muy fina, si gustamos

Lo primero es cortar los tomates. Para que el resultado sea óptimo, eliminamos la parte parte blandita de las pepitas, y la piel, si queréis. Este paso es muy importante, porque nos ahorramos que expulse agua, y así obtendremos una textura de mousse inigualable. Este truquito me lo dio Toni, marido encantador de mi encantadora amiga Ana López-Varela.
















Luego cortamos el resto de ingredientes sólidos y metemos todo en la batidora de vaso o en el vaso si lo hacemos con la batidora normal.




















La clave para que nuestro salmorejo sea una delicia es que estemos batiendo bastante bastante rato. Yo el mío lo tuve casi 5 minutos en la batidora, removiendo, cerciorándome de que el pan se trituraba bien.  Sólo así obtendremos la mejor textura, como muestra la foto.
















Bueno, una vez que batimos todo bien, servimos el samorejo en cazuelitas (las de barro son estupendas) y ponemos encima el huevito cocido partidito, los taquitos de jamón y la cebolla. Y nos preparamos para saborear un manjar fácil de hacer y además, barato oiga.


8 comentarios:

  1. ummm yo no le pongo zanahoria pero lo pruebo seguro, jajajja mil patadas voladoras a lo Chuck Norris jeejjeej

    ResponderEliminar
  2. Me apunto a comerrrrrrr!!!!! Que yo el salmorejo me lo tomo hasta casi de desayuno.......

    Besotes guapa!!!

    Lau.

    ResponderEliminar
  3. ¡¡ Qué rico !!! Bien espesito, casi de untar. Que le den a las lorzas...

    ResponderEliminar
  4. Buen truco el de la zanahoria. Un gusto ver tu estupendo salmorejo.

    Mi primo en Cádiz, hace gazpacho, luego salmorejo y luego lo mezcla haciendo un gazporejo, o un salmoracho.

    Lo probaste?

    ResponderEliminar
  5. Hola, ¿puedes habilitar la opción de recibir los nuevos post por mail?. Gracias, y un saludo.

    ResponderEliminar
  6. Que me digan como hay que hacer para comprar tomates olorosos y no pagarlos a crédito!
    Con cebollita por encima tiene que estar de muerte!
    Mari K

    ResponderEliminar
  7. El salmorejo me pierde, me vuelve LOCA! bien espeso y bien rico, ñam ñam

    ResponderEliminar

Con respeto y buen rollo, todos podéis dejar sugerencias, aportaciones...¡esto se hace mejor entre todos!